Somos salvos por gracia de Dios, ahora somos libres para obedecer: por amor, no por necesidad, y mediante el poder de Dios, no el suyo. Usted sabe que si se tambalea, no caerá al suelo. Los brazos amorosos de Cristo no lo dejarán caer y lo sostendrán.
Feliz Domingo, nos vemos mañana con más! !
Publicar un comentario