Como podemos apreciar, estas palabras del Salmo son bastante duras, porque esto es algo que la Palabra de Dios ha enfatizado mucho. Dios ha garantizado escuchar las oraciones de aquellos que son Suyos. El no ha garantizado escuchar las oraciones de aquellos que no le pertenecen o no quieren obedecer a su voz. La única oración que un pecador puede hacer es: "Señor, yo te acepto como mi Salvador. Te pido que Tú me aceptes como un pecador". Esa es la oración que Dios escuchará, y que Dios contestará. Pero hay personas que piensan que uno puede vivir una vida alejada de Dios, una vida vivida como uno quiera, y cuando se encuentre en problemas y dificultades podrá presentarse ante Dios en oración, y esperar que Dios lo escuche y le conteste como uno quiere que sean las cosas pero no es así. El que así vive, alejado de Dios tendrá que acercarse a Dios, iniciar una relación con El <o restaurarla si la tenía antes> y entonces si, Él escuchará su oración y la responderá. Hay quienes tienen la falsa idea de que uno puede pedirle a Dios ayuda en cualquier circunstancia, indiferentemente de que sea un hijo de Dios o no.
Nadie podrá tocarte si Dios no le da permiso para hacerlo, así como hizo con Job, esto significa que Dios le da a usted una armadura para que nadie pueda tocarlo.
Que Dios te bendiga, nos vemos mañana con el siguiente versículo!
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