Este varón de dolores lo despreciaron y rechazaron los que estaban a su alrededor y hasta el día de hoy sucede lo mismo. Algunos lo rechazan porque se le oponen. Otros desprecian a Cristo y su gran don de perdón. ¿Usted lo rechaza, lo olvida o lo acepta?
Que Dios te bendiga y nos vemos mañana con el siguiente versículo!
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