Alabemos y adoremos el nombre que es sobretodo nombre y nos callemos en estos tiempos, sigamos predicando y hablando de Cristo cuando se nos presente la oportunidad, cuando vayamos a evangelizar y demos a conocer todas esas cosas grandes y maravillosas que Jesús ha hecho en nuestras vidas.
Que Dios te bendiga y mañana te espero para que juntas escudriñemos el siguiente versículo.
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