Deuteronomio 30 : 16


Así es con nosotros, si confiamos en el Señor Jesucristo como nuestro Salvador personal; y lo amamos después de esto, dice Él: "Si me amáis, guardad mis mandamientos". Pero primero debe haber amor para el Salvador. Entonces, si decimos que lo hay, Dios pide que le obedezcamos y así obtendremos las maravillosas promesas de Dios para con nosotros.


Dios te Bendiga!


Publicar un comentario

Mi Instagram

Copyright © Talento en tus Manos. Made with by OddThemes